Hola a tod@s:
Esta es la vida de un
aficionado a la fotografía con muchas ganas de conocer mundo.
Siempre me llamaron
la atención las cámaras de fotos... y ya desde la primera vez que empecé a
viajar... quise tener mi propia cámara. La primera que tuve la
verdad es que no recuerdo que marca ni modelo era, pero si recuerdo el viaje, fue para la
excursión de fin de curso.
Por aquel entonces, allá por 1994, lo de las cámaras
digitales no estaba a mano de cualquiera... y tampoco me podía permitir una
reflex analógica ni nada por el estilo, así que me tuve que conformar con una
compacta normalita tipo Kodak... que tampoco estaba mal, todo sea dicho. Aunque había que
tener cuidado de no meter el dedo dentro de la foto, algo de lo que me dí
cuenta después de revelar el primer carrete… que levante la mano al que no le
pasó algo parecido…
Con ella estuve
trasteando todo lo que pude, hasta que en 2002 decidí pasar a algo más grande.
Pude cambiar a compacta digital, lo estuve pensando muy mucho... pero al final
preferí seguir en analógico, pero en reflex claro, para ganar en calidad.
La cámara fue una Minolta Dynax 404si con 2 objetivos, el
que venía en el kit, un 28-80, y el que más tarde adquirí, un 75-300,
para esos sitios a los que me costaba llegar...
No me arrepiento en
absoluto de haber seguido en analógico. Con esta cámara aprendí todo el manejo
básico que se puede aprender con una reflex. Y después de los años, me parece
mucho mejor aprender de esta manera, que con una digital.
Está claro que una
cámara digital réflex te da prestaciones que la analógica no puede, pero aprender
con una cámara con la que no te podías permitir muchos errores a la hora de
medir la obturación … el tiempo de exposición… , te hace espabilar y aprender
mucho más rápido. La verdad es que a mi me funcionó y me hizo cogerle más gusto
a la fotografía.
Recuerdo la
incertidumbre del "Cómo habrán
salido las fotos?" después de cada viaje, el día que ibas a recoger el
revelado. Y está mal que yo lo diga, pero recuerdo que casi siempre me
sorprendía gratamente.
Pasó el tiempo… y
después de 6 años y casi 3000 fotos, llegó el momento de cambiar a digital.
A principios de 2008
entré en la fotografía digital de la mano de Sony.
Muchos diréis que
por esa época Sony estaba “empezando” en las cámaras réflex digitales, y que me
debería de haber decantado por una de más nombre, es posible, pero también hay
que mirar el precio, y lo que me podía permitir en ese momento era una Sony de
la gama baja. Además, con una Sony podía seguir utilizando el teleobjetivo de
Minolta, ya que eran totalmente compatibles. Y teniendo en cuenta que tenia que
multiplicar por el factor de escala de analógico a digital, se me transformaba
en un 112-450 q la verdad, q para alguna foto que otra no me vino nada mal.
En resumen, tenía
nuevo equipo, una Sony Alpha100 con
un único objetivo, un Sony SAL 18-200. Decidí decantarme por un solo objetivo
todo terreno por eso mismo, por ser todo terreno. Seguro que se pierde calidad,
no lo dudo, pero para un fotógrafo aficionado como yo, en ese momento me
pareció mucho mejor esa opción. Pierdes calidad, pero ganas en amplitud de gama
de fotografías, sobretodo para viajes, que era para lo que más uso la cámara.
Seguro que hay gente
como yo, que a veces no hacía una foto por no andar parando y cambiando de
objetivo. O peor aún… que no hacía una foto porque sabía que no te iba a dar
tiempo a cambiar el objetivo.
La verdad es que el
cambio fue espectacular. Poder ver las fotos según las sacabas te hacía hacer
más y más fotos. Y probar más y más cosas. En el primer viaje que hice con
ella, en 20 días cayeron casi 3500 fotos.
Lamentablemente al
año y medio, concretamente a finales de 2009 empezó a dar problemas.
Funcionó bien
mientras duro, y si tenemos en cuenta la cantidad de fotografías, hice casi el
doble de fotos con la Sony,
(llegué a casi 6000) que con la
Minolta, pero como ya he dicho empezó a hacer cosas raras. La
mandé al servicio técnico, la arreglaron y acto seguido la vendí.
El cambio fue a una Nikon D3000 con objetivo Tamron 18-200.
Cambie a la que económicamente satisfacía mis necesidades, a sabiendas de que
era más para alguien que iba a empezar en la fotografía, que para mí, que ya
tenia unos añitos de experiencia. Continué con la misma filosofía de tener un
solo objetivo porque hasta ahora me había dado buenos resultados.
De esta cámara solo
puedo hablar maravillas. Realmente está hecha para gente que se inicia en la fotografía
digital. Todo, absolutamente todo tiene una ayuda para que no te pierdas y
sepas lo que estás haciendo. El objetivo también es bueno, a pesar de ser no
estabilizado. Para los puristas supongo que será un objetivo para muy
principiantes, pero yo os puedo asegurar que sabiendo sus carencias y usándolo
correctamente os puede dar muy buen resultado.
Y de repente… a
principios de abril de 2011 me llega el
notición.
Gano el segundo premio en un concurso de fotografía !!!!
Nada más y nada
menos que una CANON 7D con un
objetivo Canon 15-85 !!!!
No me lo creía, de he
hecho aún no me lo creo… aún sigo en una nube.
Pero claro… yo ya
tenía cámara, y de distinta marca. Así que solo había 2 opciones, o me quedaba la Canon y vendía la Nikon, o viceversa.
La decisión, después
de mucho pensar, fue quedarme la
Canon. Una cámara así es difícil de comprar.
Como el objetivo que
venia en el kit se me quedaba un poco corto, y para cámaras así no hay que
andarse con objetivo todo terreno, busqué un teleobjetivo acorde a mis
necesidades y económicamente viable y …esto es con lo que ando ahora mismo:
Objetivo Canon EF-S 15-85/3,5-5,6 IS USM
Objetivo Canon EF70-300/4-5,6 IS USM
Trípode, filtros y
demás útiles que a veces ni me acuerdo que llevo en la mochila.
Y de momento… hasta
aquí puedo contar.
Esperando con ganas
la fecha del próximo viaje para seguir viendo el mundo desde mi cámara.
Gracias por leerme.
Hasta pronto y
saludos a tod@s.
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